En este tiempo tan desconcertante e incierto, como mujeres “nacidas en el Calvario”, la imagen de María al pie de la Cruz, sigue siendo hoy para nosotras icono que expresa la doble vertiente de la contemplación de María que “estaba” al pie de la Cruz de su Hijo y de la misión y servicio de compasión,, en la parcela que compartimos con nuestros hermanos y hermanas en humanidad.
Integradas en el grupo de Vida Ascendente de nuestra parroquia y barrio de Hortaleza, hemos experimentado el ser “una de tantas” …, a través de los tres ejes en los que se fundamenta este movimiento internacional de seglares “dirigido por seglares”: la espiritualidad, la amistad y el apostolado, desde el estar en casa… a través del teléfono, los wasaps…
Hemos vivido la dimensión de nuestra espiritualidad de compasión, evangélicamente, en la misma realidad de miedo y esperanza. Todas las semanas hemos podido leer la Palabra de Dios con un breve comentario que nos ayudaba a reflexionar y a orar cultivando la relación con Dios, dejando que iluminara nuestra vida y compartiéndolo entre nosotros. La amistad, en la preocupación de los unos por los otros, animándonos en nuestro largo encierro, consolándonos en los momentos difíciles de la pandemia y acompañándonos en las situaciones negras y tristes cuando alguien sufría una pérdida de un ser querido…y también alegrándonos y felicitándonos en las fechas festivas de los cumpleaños… Y la misión, sin salir de casa, expresándonos a través de wasaps las razones para la esperanza y la firmeza de la fe, el apoyo mutuo y la solidaridad, particularmente, en la ayuda a los necesitados a través de Cáritas parroquial…
Hoy seguimos caminando y aprendiendo de la experiencia de fragilidad y vulnerabilidad en este doloroso y triste presente para tantos… De lo que, sencillamente, a través de las palabras y gestos pequeños, pueden ayudarnos a vivir en la Esperanza y a descubrir como fecundidad lo que puede sorprendernos… Permaneciendo, en la misma incertidumbre, abiertas a la novedad de Dios que nos sigue invitando a “ser compasivas como Él es compasivo”.
La Comunidad de Hortaleza