Después de estos meses de angustia por la segunda ola del COVID; brilla una luz de esperanza por la vacunación y la disminución de casos de contagio en nuestros barrios de Tarapoto. Son ya varias personas conocidas que van teniendo acceso a las vacunas, lo cual es un gran logro, cuando veíamos esta situación tan lejana el año pasado.
Después de estos meses de angustia por la segunda ola del COVID; brilla una luz de esperanza por la vacunación y la disminución de casos de contagio en nuestros barrios de Tarapoto. Son ya varias personas conocidas que van teniendo acceso a las vacunas, lo cual es un gran logro, cuando veíamos esta situación tan lejana el año pasado.
Todo ello nos ha devuelto la posibilidad de retomar las actividades con los niños del Programa de Apoyo Escolar en Satélite. Es una gran alegría para los niños y niñas el poder reencontrarnos, disfrutar de los espacios de aprendizaje y de recreación que son tan necesarios para ellos.
Es importante el poder recobrar estos espacios porque a nivel educativo, con esta pandemia a cuestas, resultaba muy difícil que los niñ@s tuvieran una educación de calidad. Somos conscientes de que nuestro granito de arena es como una gota en el mar, pero gotita a gotita se puede hacer “un océano” y ese es nuestro gran desafío.
La comunidad nos hemos ido uniendo a estas actividades desde los diálogos y oraciones personales y comunitarias y es por ello que gozamos con las actividades de los niñ@s en nuestro espacio del Apoyo Escolar de Satélite, todas ellas cargadas de detalles de vida y esperanza que se van gestando en el día a día.
Comunidad de Tarapoto