Comunidades cristianas compasionistas (CCC)
Ser Laico Compasionista, es ser vida en el Mundo
Al igual que los discípulos con Jesús que lo siguieron, escucharon sus enseñanzas y se aferraron a ellas, el LAICO COMPASIONISTA, es la persona que se forma bajo la dirección y el acompañamiento de las Hermanas de Nuestra Señora de la Compasión en palabras y en obras concretas.
Adquiere un estilo de vida que se alimenta y fortalece al beber el carisma y la espiritualidad del padre fundador Mauricio Garrigou. Contempla, escucha, acoge y actúa dejándose guiar por el Espíritu de la compasión de Dios con el fin de dar respuestas solidarias y compasivas, dando solución a las necesidades de nuestras hermanas y hermanos más necesitados de nuestro mundo.
El LAICO COMPASIONISTA se mira a sí mismo y a los demás de manera diferente, siente y actúa movido por el carisma y espiritualidad de la Compasión que nace a raíz de la contemplación de CRISTO llagado y coronado de espinas y de MARIA al pie de la CRUZ de su Hijo que se prolonga y se refleja en la realidad de nuestros pueblos.
Esta contemplación lo lleva a la práctica y a ponerse al lado de cada ser sufriente de la sociedad, pero no se queda en contemplación, sino que se abaja al nivel del que sufre, del marginado, del débil y se solidariza con él haciéndolo sentir amado y valorado por nuestro Dios compasivo, lo cual lo lleva a calzar el zapato del otro, a ser con él para que alcance una vida digna, sustentado en la misericordia y la ternura.
Ser LAICO COMPASIONISTA es encontrar a DIOS en la vida cotidiana, es decir, en el día a día de la vida personal, familiar, en el lugar donde ejerce su profesión, de sus relaciones vecinales y vida social, en las decisiones éticas, en la acción ciudadana en el amplio tema de los derechos humanos, en la defensa por la vida, además en el camino de la economía, en la participación activa en la política, en el mundo de la cultura, etc. Es decir, el laico compasionista actúa en los lugares donde se mueve y en los espacios a donde Dios le sigue llamando y enviando a vivir su Compasión cada día.
Ser LAICO COMPASIONISTA encierra un compromiso muy grande y significativo, es ser herramienta de DIOS COMPASIVO, donde se sirve a los hermanos necesitados sin distinción, partiendo del principal mandamiento “AMAR A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS Y AL PROJIMO COMO A SI MISMO”.
Todo esto implica un compromiso permanente y a la vez una exigencia frente a su vocación, siendo testimonio con su vida y sus palabras. Aceptando que todo lo que va viviendo y los obstáculos que va encontrando en el camino no siempre son fáciles. Tiene dificultades, contrariedades, incomprensiones porque no todo le sale bien.
El Laico Compasionista es abierto a acoger a otros que quieren sumarse a este estilo de vida. Aprende y trabaja en equipo con los demás, no de manera solitaria…Va entrando en complementariedad y en comunión junto con los otros que buscan realizarse en la vida y se va abriendo a una misión más universal allí donde la Congregación está presente.
Por último, el Laico Compasionista tiene la certeza que DIOS va delante de él mostrándole el camino y nunca le abandona.
CCC CALI – COLOMBIA