Inspirado por el LEMA de este año: CRECEMOS EN COMPASIÓN, el Colegio en pleno comenzó, a mediados de marzo, su andadura hacia la Celebración de nuestro día Grande. El jardín, los pasillos, la Capilla comenzaron a ser engalanados… Hubo hasta quienes ya fueron pensando el menú para ese día…, mientras otras expresaban la Compasión acentuando la ancha sonrisa con la que acompañan, la acogida de cada día, a los que llegan al Cole.

Siguiendo las Orientaciones de Pastoral, todos los ciclos, cada uno a su nivel, tomaron como punto de referencia la Parábola de “El grano de mostaza”.

Los chicos la leyeron bajito y en grupo. Se les ayudó a interiorizarla, a compartir, a orar y… llegaron a descubrir la compasión en las pequeñas semillas que Papá-Dios había puesto en sus corazones, y en el corazón de cada persona. Semillas que “se morían de ganas” por germinar, por brotar, por ¡crecer y crecer!… Hasta hacerse “mayor”. Hasta ser un árbol que pueda ofrecer: flores en primavera, sombra en verano, frutos en otoño…, cobijo, a los pajarillos, en invierno…

Esos días, las aulas olían a semilleros germinando distintas formas de CRECER EN COMPASION El aula de música, a su vez, acogía voces, sostenidos y bemoles, en los ensayos de cantos para la Eucaristía del gran día la Compasión. En ella, también ofrecieron el fruto de sus trabajos.

La Comunidad de Presencia en
Colegio “María Corredentora”